Amor es...
Cuando estás con el amor de tu vida, se el niño que tienes dentro, no tengas en cuenta tu historia, sólo hay que aceptar que has de sentir qué amas; el pasado que hemos de perdonar, sin duda nos enseña pero no ha de condicionarnos; hazlo en un atrevimiento de libertad, realmente has de saber que lo mereces y que está en tu mano experimentar.
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El Amor en tu vida siempre es una nueva y única vivencia que regalarte. |
Tu libertad radica en el perdón sin revisión; sólo la intención de ser y sentir es lo que cuenta.
Date permiso para vivir una realidad de libertad, liviandad y suavidad frente al amor de tu vida, permitiendo que tus pensamientos positivos te guíen en este camino.
Vivir plenamente implica abrirnos a las posibilidades que nos brinda el amor, permitiendo que nuestra mente se llene de pensamientos positivos y constructivos.
Vivir plenamente es una virtud que nos invita a abrirnos a las posibilidades que nos brinda el amor en todas sus formas.
Cuando nos permitimos ser receptivos y permitir que nuestra mente se llene de pensamientos positivos y constructivos, creando así un entorno propicio para el crecimiento y la felicidad.
El vivir plenamente nos invita a abrirnos al amor y permitir que nuestra mente se llene de pensamientos positivos y constructivos.
Al abrazar esta virtud, cultivamos la compasión, la gratitud y la apertura hacia los demás, construyendo relaciones significativas y nutriendo nuestro propio crecimiento personal. Al vivir desde esta virtud, encontramos la clave para una vida plena y satisfactoria.
Al hacerlo, creamos una realidad donde la libertad, la liviandad y la suavidad se convierten en elementos fundamentales en nuestra relación.
Al permitirnos vivir desde una perspectiva positiva, nos liberamos de los miedos y las limitaciones que podrían obstaculizar nuestro vínculo con el amor de nuestra vida.
Nos abrimos a la posibilidad de experimentar una conexión profunda y auténtica, donde la libertad de ser uno mismo y de expresar nuestros sentimientos es primordial.
La liviandad y la suavidad se convierten en características clave de esta realidad amorosa. Nos permitimos fluir con naturalidad, sin cargas emocionales innecesarias o expectativas rígidas.
Nos entregamos al amor con un espíritu ligero, permitiendo que los momentos de alegría y felicidad sean parte integral de nuestra experiencia compartida.
Al cultivar pensamientos positivos, creamos una atmósfera de amor y armonía en nuestra relación. Estos pensamientos nos impulsan a actuar con amor y generosidad hacia nuestro ser amado, fomentando una conexión sólida y significativa.
Date permiso para vivir esta realidad amorosa donde la libertad, la liviandad y la suavidad se entrelazan en cada encuentro.
Permítete ser tú mismo y recibir el amor con apertura y gratitud. Confía en que tus pensamientos positivos te guiarán hacia una relación llena de satisfacción y plenitud.
En resumen, al permitirnos vivir desde una perspectiva positiva, creamos una realidad donde la libertad, la liviandad y la suavidad se manifiestan en nuestra relación amorosa.
Al cultivar pensamientos positivos, construimos una base sólida para un amor auténtico y satisfactorio.
Date permiso para vivir y disfrutar plenamente del amor que te rodea.
Todo tu mundo, todo lo que te rodea está para vivir el presente con tu pareja, con tu amor, y con la complicidad en el sentido de la vida que mueva las fibras más profundas de tu sentir.
La vida es para tomarla y sentir con libertad; es un poema de amor de Pablo Neruda que nos merecemos vivir en toda su intensidad y esplendor.
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Ten la virtud de sentir, buscar y actuar con Amor en tu Vida. |